martes, 4 de febrero de 2014

La estadística


Quien me conoce sabe que dudo muchísimo de la estadística como explicación aunque la admito ligeramente como posibilidad y tendencia.
Pero lo que me llama la atención es la cantidad de papel y palabras que los medios –sobre todo los deportivos- dedican a los datos. Cuando no nos recuerdan que tal jugador lleva más de 6000 minutos sin rascarse el culo durante el juego, nos dicen que tal equipo lleva veinte años sin empatar con tal otro a cinco goles. Cualquier cosa les sirve para llenar el comentario, hasta el punto de que tanto en audiovisual como en escrito, ocupan el mismo tiempo y espacio que el resto de las noticias.
Y cierto  es que, en ocasiones, echo de menos la “memoria” que parecen tener los que se dedican a informar sobre el futbol y su aplicación a la vida social y política, porque igual que recuerdan que “hace cinco años en el partido de X contra X, fulanito tuvo un gesto obsceno hacia la grada”, podrían recordar (y no sé porque no lo hacen),que tal político, artista, sindicalista, etc, hace poco tiempo decía lo contrario de lo que dice ahora. Es solo un ejemplo.
Si así lo hicieran harian un gran favor a la ciudadanía que tiene –en general- una memoria muy frágil sobre todo para aquello que le chirría de alguna manera. Pero no. La falta de argumentaciones abona la crispación y si a ello unimos la facilidad de la gente para quedarse en los titulares (la forma más fina de manipular), queda claro que, lejos de recoger la opinión pública, la crean para dar origen a la opinión publicada.
Si no están de acuerdo sobre la utilización de la estadística para banalidades deportivas y a falta de uso en la vida social y política, les sugiero lean hoy cualquier periódico pero con sentido crítico, sin quedarse en el titular y utilizando el bagaje cultural que cada uno posee.